viernes, 6 de septiembre de 2013

Cultura General: No sabemos lo que tenemos - Los Llanos

NO SABEMOS LO QUE TENEMOS
BIODIVERSIDAD DE LOS LLANOS VENEZOLANOS

Izq: Jaguar, Der: Garza Blanca.

Una ecorregión es un área de gran tamaño que puede ser de agua o de tierra y que contiene a un conjunto de comunidades naturales que comparten la mayoría de sus especies y guardan semejanzas ecológicas. Los Llanos venezolanos son considerados como una ecorregión de gran importancia a nivel mundial, en la que se llevan a cabo proyectos de conservación que ayudan a garantizar que su biodiversidad se conserve y siga siendo considerado como una ecorregión prioritaria en el mundo.

Es gracias a las condiciones ambientales de la mencionada ecorregión que se tiene una alta biodiversidad en toda su extensión, que está constituida por una alta variedad de sabanas y bosques. La temperatura media anual se encuentra entre los 26 y 28 °C (con una fuerte variación diaria de hasta 10 °C), mientras que el suministro de agua a  las especies es garantizada por los muchos ríos que tienen Los Llanos y la alta precipitación que tiene lugar en el período de lluvia anual (se trata de una ecorregión biestacional: época de lluvia y época de sequías).

Esta amplia ecorregión contiene diversas especies en su fauna, destacándose el cachicamo sabanero, la danta, el chigüire, la tonina, el jaguar, el alcaraván, la garza blanca, el morrocoy y la baba, entre otros. A su vez, la flora de Los Llanos se ve marcada principalmente por helechos, dicotiledóneas y monocotiledóneas. La fauna de Los Llanos contiene el 47% de los mamíferos de Venezuela mientras que la flora abarca el 22.3% de la total nacional. Sin embargo no se encuentran especies endémicas de fauna, aunque sí de flora.

Arriba Izq: Cachicamo sabanero, Arriba Der: Tonina
Abajo Izq: Chuigüire, Abajo Der: Helechos

Mas la biodiversidad de Los Llanos está en peligro, se encuentra amenazada. Los principales factores causantes de ello son la expansión urbana, la cacería, los incendios y el comercio ilegal, entre otros. La pobreza local y la falta de proyectos y alternativas viables aumentan el impacto sobre la biodiversidad de Los Llanos.

Para saber qué áreas requieren mayor atención, la Fundación para la Defensa de la Naturaleza (FUDENA) realizó una primera fase de estudio de los aspectos socioeconómicos de Los Llanos, incluyendo el estado de la biodiversidad existente y tomando en cuenta las relaciones entre los grupos humanos con su entorno vegetal y animal. Una vez terminada esta fase se hizo un proceso de consulta en el que participaron y aportaron sus observaciones unas 235 personas pertinentes, en eventos de tipo sectorial, regional y general.

           Gracias a este proceso se estableció la necesidad de fortalecer las instituciones encargadas de la aplicación del marco legal ambiental venezolano, así como tomar medidas de monitoreo y vigilancia. De la misma manera, se resalta la importancia de realizar programas de educación y capacitación ambiental para formar a los habitantes de las zonas rurales, incluidas las comunidades indígenas. Todo esto, con el fin de mantener y fortalecer la biodiversidad en las áreas naturales existentes actualmente y a futuro, e incluso también en áreas privadas cuyos propietarios colaboren con la causa ambiental.

         Las áreas naturales protegidas tienen como objetivo principal la de conservar la biodiversidad existente. En el caso de los refugios de fauna silvestre, esto ocurre de una forma más puntual buscando la protección y conservación de determinadas especies. Existen también las reservas, en las cuales se llevan a cabo programas experimentales y las actividades en ella son reguladas. Actualmente, FUDENA trabaja conjuntamente con otras fundaciones y con el Ministerio del Ambiente y Recursos Naturales, para generar un Plan de Ordenamiento y Reglamento de Uso (PORU), ya que existen áreas cuya protección y posibilidades de conservación se ven limitadas por carecer de éste, como por ejemplo los Esteros de Camaguán.


Por su parte, las áreas privadas aun no son oficialmente alternativas para la conservación. Sin embargo, con el apoyo de FUDENA y la colaboración de muchos propietarios llaneros preocupados por la protección, mantenimiento y restauración del ambiente natural, se han logrado grandes avances como fue la creación de la Red Venezolana de Áreas Privadas para la Conservación de la Naturaleza (APRINATURA), a través de la cual se han llevado a cabo actividades de rehabilitación, investigación, conservación y educación ambiental con las comunidades vecinas.

Finalmente es necesario señalar que la educación ambiental ha avanzado, pero aún hay mucho camino que recorrer. Se debe incentivar la participación de las autoridades y de El Estado en la conservación de las ecorregiones, así como alimentar los procedimientos de capacitación y actualización que buscan sensibilizar a la gente sobre el uso de los recursos. Por último se deben desarrollar más y mejores proyectos sustentables, viables y amigables con la biodiversidad, tanto de Los Llanos venezolanos como del resto del mundo.



Fuente consultada: D. B. Ruiz, Ecosistemas, 13, 2, págs. 124-129 (2004).


BlackJASZ

miércoles, 21 de agosto de 2013

Cultura General: Importancia de la Biodiversidad para La Alimentación del Ser Humano

Importancia de la Biodiversidad para La Alimentación del Ser Humano
LO IMPRESCINDIBLE DE LA BIODIVERSIDAD



Para nadie es un secreto que la población mundial (del hombre) está en continuo crecimiento, que cada día que pasa hay más seres humanos en La Tierra, lo cual se traduce en más personas que alimentar. Frente a este hecho infalible se vuelve necesario que el ser humano se encuentre al tanto de qué es lo que precisamente le permite conseguir más alimentos: la biodiversidad.

La biodiversidad es un concepto complejo referente a la variabilidad de organismos vivos que conforma la diversidad de especies, abarcando así desde los genes de una población local hasta las comunidades que componen los múltiples ecosistemas del mundo. Sin embargo, es pertinente preguntarse en este punto: ¿por qué es tan importante la biodiversidad para la alimentación del ser humano?[1]

Las plantas y los animales son la base de la alimentación del ser humano, gracias a que con fines alimenticios cierto porcentaje de las especies de plantas y animales son cosechadas y domesticadas, respectivamente. Actualmente se estima que existen más de 30.000 especies de plantas comestibles, pero que por distintas razones (históricas, culturales, económicas), sólo 20 constituyen el 90% del alimento mundial, de las que sólo tres (maíz, trigo y arroz) representan más de la mitad de los recursos alimenticios del planeta.[2]

            Sin embargo hay una clara influencia de la biodiversidad local en la selección de los alimentos a ingerir. Por ejemplo, la dieta alimenticia que consumen los habitantes de Canadá no es la misma de los habitantes de Ecuador, ni las costumbres alimenticias de los caraqueños es la misma que las de los Hotï.

Otro ejemplo de esto puede ser el siguiente: los estadounidenses, mundialmente conocidos por su gusto por la comida rápida, consumen ampliamente hamburguesas, perros calientes, pizzas y pollo frito. También agregan a su dieta una amplia gama de cereales, jugos y productos realizados con distintas harinas. Por su parte, los japoneses consumen ampliamente arroz, fideos, diversos vegetales y numerosos tipos de pescado, aprovechando que se encuentran en un país rodeado de mar, donde la pesca es muy prolífera y se encuentra una importante diversidad biológica marina, aderezadas con una amplia gama de salsas elaboradas con alimentos abundantes en su país, como la soya. El contraste entre ambas dietas (y ambas biodiversidades) es importante[3].

Es lógico que para una zona determinada, la influencia de la biodiversidad cercana sea muy fuerte, aún en la actualidad, cuando casi todo ha sido industrializado. Se conoce que tras la llegada de Cristóbal Colón a América hubo un intercambio masivo de alimentos, pues los europeos encontraron productos nuevos para ellos, como por ejemplo:

-       El maíz: planta originaria de Centroamérica, base de la alimentación de los aztecas, los mayas y los incas.
-       La papa: tubérculo de la planta rico en almidón y vitamina C, descubierta por los españoles en Perú.
-       El cacao: fruto considerado como alimento de los dioses, cuya bebida fue favorita de los emperadores en México. El cacao llegó a ser usado también como moneda.

Finalmente éstos y muchos otros alimentos se difundieron a lo largo del mundo, llegando a ser parte de la biodiversidad de múltiples países y regiones. Todo esto, a pesar de estar impulsado por factores económicos, resalta la importancia que cobra la biodiversidad en la alimentación del ser humano[4].



Sin embargo, que la biodiversidad sea la base de la alimentación humana no es el único factor de importancia, pues otro punto valioso (opinión que seguramente apoyaría un nutriólogo) es que gracias a la amplia biodiversidad existente es que al ser humano le puede ser posible llevar una dieta completa, sana y balanceada. Si sólo se alimentara de animales, por ejemplo, sufriría un impacto negativo en su salud y calidad de vida. Con una mala alimentación es inevitable sufrir enfermedades y padecimientos de gravedad que pueden llevar a la muerte. Gracias a la biodiversidad se pueden conseguir todos los nutrientes requeridos para el correcto funcionamiento del cuerpo y toda la energía necesaria para enfrentarse día a día al difícil ritmo de vida de un ser humano. Es precisamente por la biodiversidad que se puede disponer de las vitaminas, los minerales, las proteínas y las calorías que garantizarán un mejor rendimiento y un sistema inmunológico más fuerte.

También es importante destacar que la alimentación se ve fuertemente afectada (y hasta cierto punto controlada) por la economía, lo cual a su vez  modifica la biodiversidad en una región y los hábitos alimenticios de las poblaciones que habiten dicha región. Según el nivel de desarrollo de los países y del poder adquisitivo de sus habitantes, la capacidad de adquirir determinados alimentos puede ser facilitada, o por el contrario, prácticamente imposibilitada, pudiendo limitar la alimentación de la población a sólo un grupo de alimentos. Esto deriva en la necesidad de mejorar los programas sociales y políticas nacionales para permitir que los hogares más pobres obtengan la cantidad de nutrientes necesarios y que sepan administrar su consumo con mayor eficacia.

Si se estudian y analizan los nutrientes presentes en las especies existentes, es posible la creación de sistemas de información más eficaces que beneficiarían la agricultura y la alimentación de una determinada población. Mejorar la agricultura (y otros métodos de producción de alimentos), así como concientizar respecto a una adecuada nutrición, son medidas necesarias para garantizar que la biodiversidad sea aprovechada al máximo para la alimentación adecuada del ser humano a lo largo del globo terráqueo.

Finalmente, debido a estos factores se hace imposible ignorar que la biodiversidad es un factor clave para que el ser humano pueda aspirar a un máximo rendimiento, a una mejor salud, e incluso, a una mayor esperanza de vida.

Sin biodiversidad no habrán suficientes alimentos.




BlackJASZ





[1] Convention on Biological Diversity, 1992.
[2] IES LA CORREDORIA. Importancia de la Biodiversidad. Fecha de consulta: 13/08/2013. Disponible en: http://nea.educastur.princast.es/repositorio/RECURSO_ZIP/1_jantoniozu_Bio_Clas_1ESO/Bio_Clas_1ESO/pag/biodiversida_7.htm
[3] LIKES. What a week of groceries looks like around the world. Fecha de consulta: 13 de agosto de 2013. Pág. 3, 4. Disponible en http://goo.gl/ta11Qw.
[4] Gran Enciclopedia Espasa. Tomo 1, Colombia, año 2005. Pág. 482.

lunes, 27 de mayo de 2013

Cultura General: La Muerte Negra

            A lo largo de la historia, la humanidad se ha visto obligada a enfrentar numerosas catástrofes de distintos tipos y naturalezas, algunas inevitables, otras no tanto. Entre todas ellas se puede destacar la mayor pandemia que ha golpeado al hombre: la peste negra.

            Conocida actualmente como “peste bubónica”, esta enfermedad arrasó con un tercio de la población europea en distintos brotes que tuvieron lugar en el siglo XIV. Historiadores e investigadores han atribuido el origen de dicho desastre a muchas causas, pero si concuerdan en un punto es en sus inicios en China. La enfermedad comenzó a desplazarse desde el oriente hasta Europa, pues  la bacteria Yersinia pestis, causante de este mal, era transmitida por la picadura de las pulgas que cargaban las ratas negras infectadas. Éstos animales viajaban muchos kilómetros a través del mar en barcos mercantiles de la época, hasta alcanzar diversos destinos en el viejo continente, a donde llegaban para quedarse. Sobre estas embarcaciones existen diversas historias que cuentan que en ocasiones los barcos llegaban a las costas con su tripulación totalmente fallecida.

            Son varios los factores que dieron pie a que la enfermedad se propagara de una manera tan extensa. Principalmente, las malas condiciones de salubridad en las que la mayoría de la gente vivía permitieron que las pulgas y ratas se encontraran cómodas en casi cualquier rincón, hallando comida y desperdicios por doquier. Pero también hubo otro factor cultural que derivó en desastre: el asesinato masivo de gatos. Si bien, por un lado grupos denominados “satánicos” veneraban a estos animales, confiriéndoles cualidades mágicas y demoníacas, el problema se vio agravado porque la Iglesia Católica les catalogaba de siniestros y les relacionaban con el Señor Oscuro (lo cual en parte se debió a la connotación y cualidades que les conferían los grupos herejes). Cabe mencionar también que algunas características típicas de los felinos potenciaban las supersticiones (acentuándolas, por ejemplo, si sus pelajes eran negros). Finalmente los gatos se vieron perseguidos hasta su casi exterminio.


            Todo esto no quedó exento de consecuencias: las violentas acciones tomadas contra los gatos tuvieron una seria repercusión sobre la sociedad. El gato caza al ratón, y en ausencia de los félidos, los roedores encontraron el paraíso en una Europa sin enemigos naturales. Las ratas provenientes de China invadieron tierras italianas y alemanas, para empezar. Y con las ratas llegaron las pulgas, trayendo consigo la latente y mortal Peste Negra, lista para ser difundida.

            Pronto la enfermedad se difundió entre la gente, causando sorpresa por las rápidas defunciones que la peste acarreaba. Los síntomas atacaban sin piedad, figurando entre ellos fiebre, dolores de cabeza, vómitos, escalofríos y debilidad general. Horas después de manifestarse este cuadro clínico, aparecía el bubón característico que le dio nombre a la enfermedad. Se trataba de un bulto de hasta diez (10) centímetros de diámetro, de color oscuro y doloroso al tacto, el cual podía formarse en la región inguinal, axilar o en el cuello. Si el caso era fatal, la muerte generalmente no tardaba más de cuatro días, en el caso contrario, la fiebre comenzaba a remitir al quinto día.

            Los doctores de la época usaban unos trajes especiales de cuero a la hora de tratar a los pacientes, pues era la única medida de seguridad que les daba tranquilidad, pues no se sabía con exactitud a qué se debía y cómo se transmitía la peste. Las recomendaciones que dieron los científicos para evitar contagiarse llegaron incluso al absurdo, figurando entre ellas algunas medidas como: evitar las duchas (por considerarlas insalubres), tomar mucho sol (en especial las personas con sobrepeso) y no dormir en la misma habitación que una mujer. También se destaca que una de las primeras medidas tomadas fue quitarle la ropa a los que llegaban a las entradas de las ciudades, ofreciéndoles prendas “limpias” en calidad de préstamo. La ropa de los viajeros era rápidamente desechada, pues temían que las telas pudieran actuar como portadores. Y efectivamente las telas eran un factor importante que impulsaba la diseminación de las pulgas (que muchas veces se alojaban entre los tejidos).

            Cuando los brotes de la peste negra comenzaron a hacer estragos, los judíos fueron rápidamente acusados de causar la intoxicación y el envenenamiento de pozos. En varios países de Europa fueron rápidamente disueltas las comunidades judías, mientras mucha de su gente era exiliada o hasta asesinada. Lógicamente, la peste siguió avanzando.

            Tras muchos brotes (el más fuerte de ellos en 1348), se estima que la población de Europa se redujo entre un 30 y 60% durante la primera mitad del siglo XIV, cuando la pandemia tuvo lugar. Esto trajo como consecuencia una importante disminución poblacional en zonas rurales y la reducción de territorios fértiles (a causa de la muerte y el abandono de los campesinos). En la zona norte de Italia, por ejemplo, la producción agrícola cayó al 60%, tan sólo entre 1340 y 1370. También se cree que la escasez de mano de obra dio pie a la salida de la Edad Media, y con ello a la progresiva llegada del Renacimiento.

            Nadie sabe a ciencia cierta qué detuvo las oleadas y brotes de la Peste Negra en el siglo XIV, pero lo cierto es que a pesar de la insalubridad, la medicina poco preparada para enfrentarla, los peligrosos prejuicios y muchas otras condiciones de vida en la Edad Media, la temible enfermedad abandonó sus alcances epidémicos y pandémicos. Sin embargo, aún hoy se puede escuchar de los terribles estragos que dejó esta enfermedad, y de su presencia, que sigue acechando en la actualidad.


Por fortuna para el hombre, la medicina ha mejorado considerablemente para el siglo XXI, pero quién sabe qué otras catástrofes y enfermedades esperan ser desatadas.




BlackJASZ
Todos los derechos reservados / All rights reserved

Mapa de Visitantes: SI, USTED ESTA AQUI!!!